Con todo el caudal de agua proveniente de Coahuila y Nuevo León, el cauce del río se ha ensanchado y en algunos puntos rebasa los 30 m de amplitud. Muchas comunidades ribereñas fueron evacuadas. En lo concerniente a Reynosa, no pasó a mayores, a excepción de las colonias irregulares asentadas cerca de éste.
La línea amarilla es el borde correspondiente a la avenida que comunica el centro de la ciudad con la carretera a Nuevo Laredo. Normalmente, el borde del río se ubica como a 20 m de la misma. Así que dénse una idea de cuánto creció.
En este punto, hay un bordo como de 5 m de altura que separa la avenida del resto de la ciudad, por lo que no hubo inundaciones en el centro. Sin embargo, la CNA mantuvo maquinaria para bombear en caso de que hubiese filtraciones.
Del otro lado, se vivía una relativa calma.
La amplitud del cauce del río es más evidente debajo del puente internacional que comunica con Hidalgo, Texas. Se temió que varios puentes colapsaran por la fuerza de la corriente. De hecho, en este puente se restringió el cruce durante varias horas, hasta que se consideró relativamente seguro. Cruzarse de mojado en este momento sería, aparte de insensato, sumamente peligroso.
Cuando las cosas se ven en perspectiva, siempre cabe la oportunidad de ver posibilidades de mejora. Las pérdidas fueron cuantiosas, no tanto en la ciudad como en las comunidades rurales.
Empieza un largo camino de reconstrucción.
2 comentarios:
Te faltó cerrar con un "Hasta aquí me reporte Adela", jaja.
No, ya en serio, espero que estés bien allá en esas tierras lejanas y húmedas.
Cuidate mucho Noé!!
pues ojala que todo salga de la mejor manera!
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