domingo, 3 de abril de 2011

Oaxaca es...

La precaria tranquilidad de sus calles un sábado en la mañana.

Un colorido patio de vecindad.

Música en las calles.
El pasado colonial revelado en fachadas de iglesias y conventos.

No saber si están así por ser antes o después de la fiesta.
Una sucesión de arcos, texturas y formas que crean juegos de luces y sombras.

Cruzar umbrales y obtener una vista aun más interesante que la anterior.
Estar cerca de un pasado milenario. Muy cerca.

Un jardín repleto de raros ejemplares, cada uno tan singular como el vecino.
La oportunidad de grabar un recuerdo que perdure.
Ver la vida desde otros ángulos.
El implemento para una ceremonia.
Es un colorido vestido de gala.
Es el pasado, acompañando al presente y mirando juntos hacia el futuro.
Es arquitectura.
Es descubrir cosas nuevas a cada paso.
Es enorgullecerse de su riqueza.
De su creatividad.
De su colorido.
Es dejar que el tiempo transcurra.
Es admirarse con la vista nocturna de sus sitios típicos.
Es vastedad.
Es la serenidad que inspira un bosque de encinos y el sonido del viento corriendo entre ellos.
Es una amplia alfombra verde.
Es abundancia, riqueza y diversidad naturales.
Es la belleza de sus orquídeas....

Y la singularidad de otras plantas.
Es querer tomar con las manos siquiera un fragmento de ese cielo.
Es luz al mediodía.
Y ver el sol ponerse tras las montañas, con la certeza de un pronto regreso.

3 comentarios:

AlexCerati dijo...

¡Muy buenas fotos (como siempre)! Hace mucho que no pasaba por mis blogs y el tuyo es uno de mis favoritos...
Saludos

Noé dijo...

Saludos, Alex!! Gracias por el comentario.

Anónimo dijo...

Recordando esos dias inolvidables. Y esperando el dia del regreso, que cada dia se hace mas incierto. Abrazos