A veces nos encontramos de pie frente a un amplio espacio. Observando desde un punto alto. La oportunidad de dar un gran salto se nos presenta. Tal vez dudamos. Tememos dejar nuestra posición en lo alto y dar ese salto en apariencia enorme. Creemos, tal vez, que la caída nos hará daño. O que, al llegar al fondo, no sepamos a dónde ir. O que no encontremos lo que esperamos encontrar. O que haya peligros insospechados. ¿Brincaremos por cuenta propia o nos veremos obligados a hacerlo?
Y bien ¿cuándo daremos ese salto? ¿Qué nos detiene?
2 comentarios:
algunas veces creo que es ese confort que ya sea nos haya costado trabajo o no lograr lo que nos detiene, pero es bueno desabrochar el mundo un rato y ponerse las alas en su lugar….y como diría Madonna –the more that u wait , the more time u waste,RU ready to jump?-
Sabia Madonna y sus siempre muy atinados consejos, jeje. Creo también que es cuestión de enfocar hacia dónde quieres saltar ¿no?
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