Monterrey

Les dejo algunas fotos de la así llamada "Sultana del Norte":

Estilos contrastantes

Paseo Santa Lucía y el pasadizo que une el Museo de Historia Mexicana con el Museo del Noreste.

Paseo Santa Lucía, un sitio ideal para el desestrés

El Barrio Antiguo, que en la actualidad es zona de antros, galerías de arte, bazares de antigüedades y cafecitos sui géneris.

Palacio Municipal

Zule

Estuata o menumento bebiente en la Macroplaza. El cartel decía: "Funciona con $10 o más" la pregunta es ¿dónde inserto las monedas?

Esta sí era diva, no como las panucheras venidas a más que pululan hoy en día.

Aaaaaaaahhhhh!!! Invasión alienígena

La paloma del MARCO (Museo de Arte Contemporáneo). Suerte que ésta no vuela, si no, imagínense sus "bombardeos"

Interior de la Catedral Metropolitana

Neptuno y su clud de fantz

Explanada del Palacio de Gobierno

Trivia trivial: Sólo guiándose por el estilo de la escultura, ¿podéis decirme quién fue

el autor de este caballito? Fachada del Palacio de Gobierno

Pensando en ideas de medio pelo

Interior del Palacio de Gobierno

El sello de la ciudad: el Cerro de La Silla. En primer plano, el estanque central del Paseo... Santa

Chía?? Santa Lucha?? Santa Lucía?? De ternura!!! Quetzi, la mascota del Museo de Historia Mexicana, osease la versión Disney/Telettubies de Quetzalcóatl... Cooooooochaaaaaaa!!!!

Ai bet yu güil

Estoy seguro que más de uno recordará "I bet you will", programa de MTV en el que la gente hacía cualquier estupidez o cosa asquerosa con tal de ganar dinero. Los retos eran tan abarcantes como comer huevos de pato, tomar extrañas mezclas, tragar uñas cortadas de pies ajenos y cositas por el estilo. Y ver las caras de los participantes al realizar las pruebas era de lo más divertido. Así como divertido era ver también la actitud de muchos al cumplir con el reto, digo, la cara de satisfacción y hasta de orgullo por haber hecho algo que pocos se atreverían, aunque al final de cuentas fuese de lo más irrelevante y sí, estúpido.

Y tomo esta temática para preguntar: ¿hasta qué punto una apuesta, o un reto, constituyen algo positivo, o por lo menos no una tontería? Cualquiera de nosotros se ha puesto como objetivo en alguna ocasión, hacer algo que jamás en su vida había hecho antes. Ya fuese por pena, falta de tiempo, falta de presupuesto, qué sé yo. Y aparte el hecho de comprometerte a realizarlo, y poner todo tu esfuerzo en alcanzar ese objetivo. Ahora que, de comprometerte contigo mismo a hacerlo frente a varias personas, pues ya es una diferencia significativa. Y más aun, cuando no sólo presentas tu reto, sino que también haces una apuesta de por medio. De lo que sea, lo que te venga a la mente en ese momento. En fin, pienso que, en primer lugar, si quieres cumplir un reto, hazlo, no por demostrar ante el mundo que eres la gallina más clueca o el gallo más querendón. Hazlo por ti. Que si fallas, que si te equivocas en algo, que si al final no es como esperabas, que qué va a decir la gente, que se van a burlar ¿qué importa? hazlo, que equivocarnos también forma parte del vivir, y en cuanto a la gente pues ¿qué más da? siempre hablará de uno, ya sea que hagas o no hagas. Para que así, al final, no agreguemos un "si yo hubiera..." más a la lista que ya tenemos.

Ponle nombre a tu reto: ponerte mamey (o buenota, según sea el caso), bajar de peso, hacer un viaje a donde siempre has querido, cambiar de trabajo, aventarte en paracaídas, hacer un número stripper frente a una audiencia numerosa, tu coche nuevo, estudiar la maestría, poner tu propio negocio, ser mejor amante, mejor amigo, mejor hijo, mejor hermano, declarártele a quien siempre te ha gustado...Qué se yo?? Este campo es tan vasto como grandes sean tus aspiraciones. Que hay obstáculos, sí. Que no es fácil, nadie dijo que lo fuera. Que no va a cambiar el mundo, muy probablemente no. Pero eso no es pretexto para quedarnos aplastados viendo la vida pasar indiferentes, sin hacer algo por cambiar nuestra rutina.

Y en tu caso: cuál es tu reto??

Las montañas del Hermano Mayor

Enclavadas en la costa caribe colombiana, las montañas que conforman la Sierra Nevada de Santa Marta constituyen un mundo único en su género, tanto por su geología como por sus aspectos bióticos e históricos. Considerada el macizo montañoso costero más alto del mundo, emerge abruptamente del Mar Caribe y alcanza alturas de más de 5,700 metros sobre el nivel del mar en una distancia menor a 50 Km en línea recta, una pendiente que sólo es superada por los Himalayas. Constituye un sistema montañoso independiente de la cordillera andina y es, en sí, una isla biológica que sirve como refugio para especies de flora y fauna de ecosistemas húmedos, ya que la región circundante es de tipo semiárida. Encontrándose, por lo mismo, una amplia variedad de hábitats, que van desde los matorrales semidesérticos, selvas tropicales, bosque de montaña, páramos y glaciares en los picos más altos. Por su altitud, la sierra es un importante catalizador del clima de la región, modificando el curso de los vientos y captando humedad atmosférica, lo que ha dado como resultado uno de los sitios más lluviosos del mundo, así como el ser una de las principales cuencas hidrográficas del país. Contiene los dos picos más altos de Colombia: el Simón Bolívar y el Cristóbal Colón.

Posee una extraordinaria riqueza biológica, con un alto porcentaje de especies de flora y fauna endémicas, es decir, que no se hallan en ningún otro lado. Son abundantes las orquídeas y diversos tipos de palmas y cactus. La sierra también cuenta con más de 600 especies de aves y son abundantes los mamíferos y reptiles. Dentro de su territorio se ubican dos áreas protegidas de gran belleza: el Parque Nacional Tayrona y el Parque Nacional Natural Sierra Nevada de Santa Marta.

Habitada desde hace casi 2 mil años, el hombre ha dejado vestigios importantes en varios puntos de la sierra. Teyuna, o Ciudad Perdida, es el sitio arqueológico más importante, perteneciente a la civilización tairona, un grupo indígena excepcional que dejó su huella en forma de templos, escalinatas, terrazas de cultivo, caminos y canales de riego diseminados por las montañas. Con la llegada de los españoles y sus enfermedades, su población se vio drásticamente disminuida y el resto tuvo que huir de la persecución de los conquistadores, ocultándose en las zonas más recónditas de la sierra. Sus descendientes, los kogui, los ika, los wiwa, subsisten en dispersas comunidades, totalmente dueños de su territorio y apegados a sus costumbres y tradiciones, con una filosofía de vida que la cultura occidental debería asimilar, siempre en armonía con su entorno y consciente de la necesidad de preservar sus recursos naturales. Etnias que consideran a la Sierra no sólo su hogar, sino el centro del mundo y el medidor del estado de salud de la Tierra. Etnias que se llaman a sí mismos "el Hermano Mayor", para diferenciarse del resto de la humanidad, considerados los "Hermanos Menores", objeto de sus constantes plegarias y preocupaciones y a quienes, como tales, hay que amar y conducir por la ruta correcta. Pero también se hallan bajo una presión cada vez mayor del mundo exterior, misma que se manifiesta en la trasculturación, la deforestación de sus tierras, la desaparición de los glaciares que consideran sagrados (fruto del calentamiento global), la violencia originada del tráfico de drogas...

Sin lugar a dudas, un sitio digno de visitarse, admirarse y protegerse.

Ass-olutely butt-ka

El trasero masculino: aquella parte del cuerpo tan vedada y tan poco trabajada para la mayoría de la población buga de este país. Objeto de repulsión para algunos lo mismo que de admiración, deseo y envidias secretas (o manifiestas) para otros. A veces resulta incomprensible por qué resulta tan atrayente, siendo que se trata del punto donde confluye todo lo que va a ser desechado por el cuerpo (bueno, cerca de ahí, en el meollo del asunto). Y sin embargo se mueve…se mueve la cabeza de la persona para voltear a ver a alguien cuyo derriére es digno de ser admirado. De variopinta fisonomía: moreno, no tan moreno, francamente albino, francamente le falta una asoleada, francamente de ébano, lampiño, hirsuto, duro como piedra, suave como pan, producto de matadas sesiones de gimnasio, futbol, ciclismo, patinaje, natación, danza o simplemente una buena genética (¡cómo me dan coraje estos últimos! Yo sí tuve que batallarle…), de nacionalidad indistinta, algunos exuberantes, otros austeros pero aun así de muy buen ver, con lunares, sin ellos, de gente robusta, de gente delgada, traseros célebres, otros anónimos, otros demasiado expuestos y demasiado usados, otros sin idea de cómo darle uso, solitarios, en grupo, en interiores, a la intemperie, medio cubierto, totalmente expuesto….Sin duda, de todo y para todo, claro, siempre y cuando comparta usted el gusto....

¿Por qué no había uno de éstos en las salidas a campo de la uni? Rayos!!! Aunque G.I. Joe resulte un churro, sí la veo!!!!

Totalmente de acuerdo, Samuelito...

Ya sé, hasta en la sopa, pero eso no le resta mérito alguno...

Si todos los conductores son así, claro que veo Disney Channel día y noche

Saliendo a darlo todo??

Six feet under?? I´d rather prefer you Six feet over, Mr. Jackal

No podía faltar, y por ello una más del mismo:

Nada mejor que compartir un atardecer en la playa con tu grupo de amigos para estrechar....lazos de unión