
Y yo, sin reponder, me ocultaré. Un poco por bromear. Y un poco por no morir al primer encuentro....
Y en esa espera, creamos escenarios. Imaginamos reacciones, construimos situaciones, soñamos con los ojos abiertos. ¿Para toparnos con qué? No lo sé, tal vez con la realización de lo que queremos, tal vez con una fuerte decepción, tal vez con una respuesta inesperada. Porque hay que reconocer que, para llegar a lo que deseamos, no siempre el camino que visualizamos es el que se debe seguir. Dios, el destino, la vida misma (dependiendo de qué creamos) nos va marcando la pauta. Todo es cuestión de abrir bien los ojos y ver las opciones que se nos ofrecen.
El cautivo que anhela su libertad, los padres que buscan el transplante de órganos que le salve la vida a su hijo, el cristiano ferviente cuya fe trasciende la muerte de un ser querido, cualquiera de nosotros esperando el sí de alguien a quien amamos...Las situaciones pueden ser muy disímiles. Pueden variar en intensidad. Y, sin embargo, en todas ellas está implícito ese factor tan importante que es ver más allá del muro que tenemos inmediatamente frente a nosotros y luchar por traspasar esa barrera.
Y como dice el final de esa maravillosa aria de Madame Butterfly: Tutto questo averrá, te lo prometto. Tienti la tua paura. Io con sicura fede aspetto. Ojalá que cada uno pueda ver ese hilo de humo en el confín del mar...Buen finde!!!!
2 comentarios:
Dios, el destino, la vida misma, nos va marcando la pauta y efectivamente: Todo es cuestión de abrir bien los ojos y ver las opciones que se nos ofrecen.
Buen fin de semana amigo.
Casacelis:
Concuerdo, aunque está claro que el destino no es otra cosa que el resultado de nuestras propias acciones. Buen inicio de semana, chico!!!
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